Benedict Carey
The New York times
NUEVA YORK.- Todavía faltan tres años por lo menos para que el libro sea publicado, pero ya despierta controvertidos debates sobre el nuevo conjunto de posibles desórdenes psiquiátricos.
¿Comprar compulsivamente es un problema mental? ¿Los niños que continuamente retroceden ante ciertas visiones y sonidos sufren de problemas sensoriales, o sólo necesitan atención extra? ¿Se debería seguir considerando al fetichismo como un desorden mental?
Paneles de psiquiatras presentan esas preguntas, y sus respuestas, que van a ser ................. Leer Completo.